Después de un sábado intenso en la Curia Curiosa, el domingo no podía ser menos. Antes de las 10 de la mañana estábamos en Martialay, Soria. Es un pueblo de unos 40 habitantes que sabe cómo montar eventos, el domingo llegaron cientos de personas entre participantes en la feria y visitantes y la organización fue de 10. Nos recibieron con música popular para irnos animando.
Este es nuestro puesto, estábamos rodeadas por Tira del hilo y la panadería de Martialay y como no podía ser de otra forma, acabamos cayendo en la tentación…
¿Cómo resistirse con estos dulces? sobadillos, tortas, cocos…
Especialmente impresionante fue ver trabajar a las encajeras, que estuvieron toda la mañana sin parar ¡son unas grandes artistas!
La comida merece un capítulo aparte. Al llegar nos dieron de desayunar café y dulces típicos. A media mañana nos invitaron a torreznos y chorizos recién hechos y para comer nos sirvieron a más de 200 personas ensalada mixta, caldereta, helado y café. ¿Son o no son grandes organizadores de eventos?
Nos divertimos un montón, conocimos a mucha gente (y mucha gente nos conoció a nosotras) y como ha quedado claro, comimos genial. ¡A por la próxima!